Paul Charles Morphy (22/6/1837 - 10/7/1884).
Nació en Nueva Orleáns en el Estado de Luisiana, en el seno de una familia hispano-irlandés y madre francesa. Comenzó a jugar el ajedrez a los 10 años con su familia: abuelo, padre, hermano mayor y su tío Ernest y a los 12 ya derrotaba al maestro local Ruso y poco después derrotaría a Löwenthal en gira por el sur de los Estados Unidos.
Paul era ya un maravilloso niño prodigio, que asombraba a su familia por su portentosa memoria, que todo lo registraba. Su juego se distinguía por su inventiva, además de la exactitud en el cálculo y la metódica realización de sus planes. Pero lo esencial era que, gradualmente en el jugador más erudito de su tiempo. Licenciado en Leyes a los 20 años en La Universidad de Luisiana. Llegó a dominar a parte del Inglés, varios idiomas (Francés, Español, Alemán) y a estudiar libros de aquel tiempo de: Philidor (Analyse de Philidor y La revista La Regence) , Staunton (Chess Player´s Chronicle), Anderssen (Deutsche Schachzeitung y diversa publicaciones) , Bilguer (400 páginas del Chess Handbook) , …etc. Sobresale en el Congreso Americano de Ajedrez organizado en Nueva York participando 16 destacados ajedrecistas. Como en el torneo de Londres se adoptó el sistema K.O. por eliminatorias con mini encuentros entre los participantes, a 3 victorias y la final a 5. Morphy se clasifica para la final (¡9 victorias y 1 tabla!) con el famoso maestro Alemán Luis Paulsen (+5-1=2) a quien le gana, proclamándose Campeón de los Estados Unidos.
“La Leyenda Americana”, considerado como uno de los más destacados genios del ajedrez mundial: Paul Morphy , quién anhelaba jugar con el rey de los 40´s en ese entonces era Stauton, a quien Paul invita visitar América , pero Stauton le rechazó. Morphy por tal razón decide visitar Europa. En 1858 llega a Inglaterra y vence brillantemente a Löwenthal (Morphy tendría entonces un noble gesto : ¡el dinero del premio que ganó lo invirtió en muebles para la vivienda de su oponente por los pocos medios con que contaba¡) ; insistiendo sin lograr concertar el match con al campeón inglés. Fischer comenta : “ Stauton temía, por lo visto, enfrentarse a Morphy y creo que sus temores eran fundados. Morphy le había vencido, pero no hubiera sido un match unilateral, como creen muchos escritores, hubiera sido una gran lucha”.
En septiembre de 1858, Morphy vence al Campeón de Francia, en París a Daniel Harrwitz (+5-2=1). Dignamente y al fin Morphy consigue acordar un “match amistoso” con Anderssen en Diciembre de 1858 en París, ante las expectativas de estos dos monstruos (dos continentes), el ajedrez mundial tiene un gran match en donde el vencedor fué Paul Morphy (+7-2=2).
En su regreso a Nueva York, Morphy es aclamado triunfalmente ante un público con 2000 personas apróx. , con carteles y nombres de oponentes derrotados, con himno nacional, recibiendo de regalo: una mesa de madera rosada, con incrustaciones de plata y perlas, con un tablero de ajedrez con madreperla y ébano, con piezas de oro y plata y un pedestal de cormalina; un reloj de oro y brillantes con cifras de hermosas piezas de ajedrez. ¡Era la primera vez que se galardonaba a un ajedrecista y se recibía a un héroe con honores nacionales!.
Este genio tenía un concepto distinto del ajedrez a la mayoría de los jugadores que existían, y en su regreso de la gira por Europa se expresó así:
“No es sólo el más encantador y científico sino también el más moral de los entretenimientos. A diferencia de otros juegos, en los que el lucro constituye propósito y finalidad de los participantes, el ajedrez se recomienda así mismo a los sensatos, merced al hecho de que sus simuladas batallas se llevan a cabo sin buscar premio ni honor alguno. Indudablemente es el juego de los filósofos. Dejad que el tablero de ajedrez sustituya al tapete verde de los naipes y en seguida se apreciará una enorme mejora en la moral de la comunidad... como esparcimiento tras las duras pruebas a que nos somete la vida, merece las mayores alabanzas”.
Desafortunadamente Morphy abandona la arena del ajedrez a los inicios de los 60´s y sufre en la Guerra de Secesión en los Estados Unidos, síntomas de trastorno mental ..., La humanidad pierde a un Gran genio del ajedrez mundial...el Campeón del Viejo Mundo, fallece a los 47 años.
Opiniones respecto a Morphy
Los periódicos decían:
“Morphy domina el secreto de su invencibilidad“
De La Bourdonais:
“Para mi luchar contra este hombre es inútil, dada su tremenda fuerza. Su precisión, como un mecanismo, siempre resultan mortíferos”.
Anderssen:
“Morphy trata el ajedrez con la seriedad y la conciencia de un artista….Para él el ajedrez es un deber sagrado”.
Euwe: “ si el rasgo distintivo de un genio es que se encuentra mucho más avanzado que su época, entonces Morphy era un genio ajedrecístico en el más pleno sentido del término”.
Lasker: “ En Paul Morphy se reencarnó el espíritu De La Bourdonnais, en forma aún más fuerte, firme y orgulloso. Morphy descubrió que la brillante jugada del maestro está, en esencia, condicionada no por una repentina e inexplicable iluminación, sino por la situación de las piezas en el tablero. Introdujo la regla según la cual las jugadas brillantes y las profundas maniobras ganadoras sólo son posibles en aquellas posiciones en las que el rival puede oponérsele un exceso de energía activa. Desde las primeras jugadas, Morphy trataba de poner de manifiesto la energía interna contenida en sus piezas. Lo cierto es que, de repente, sus piezas poseían mayor dinamismo que las fuerzas enemigas”.
Capablanca: “Al revisar la historia del ajedrez, desde La Bourdonnais hasta los maestros actuales, como Lasker, descubrimos que el mayor estilista fue Morphy. No buscaba combinaciones complicadas, pero tampoco las evitaba, lo que es la forma correcta de jugar. Su principal fuerza lo constituye no su habilidad combinativa, sino su juego posicional y su estilo. Morphy lograba la mayoría de sus victorias jugando de forma simple y directa, y este método sencillo y lógico es lo que constituye la verdadera brillantez de su juego, al menos si lo consideramos desde el punto de vista de los grandes maestros”.
Alekhine: “ ¡Cuánta más vivida y más rica se nos parece la figura de Morphy, cuánto más claro es el secreto de su éxito, si nos trasladamos a la época en que vivió y creó, si nos tomamos las molestias de estudiar, siquiera un poco, a sus contemporáneos! Sigamos su paso por Londres y, sobre todo por París, donde las tradiciones de Philidor seguían vivas, donde las inmortales creaciones de La Bourdonnais y McDonnell permanecen en nuestra memoria, en un tiempo, en fin, en el que seguía vivo Anderssen y en el que sólo con brillantez apenas podía sorprender a nadie. La fuerza invencible de Morphy, ésa fue la razón de su éxito y la garantía de su inmortalidad”.
Botvinnik: “ Hasta hoy, Morphy es un maestro insuperable en el juego abierto. Para comprender cuán grande fue su significación, basta constar la evidencia de que nada sustancialmente nuevo se ha creado en ese campo desde Morphy. Cada jugador (del principiante al maestro) debería reproducir, una y otra vez, las partidas del genio norteamericano “.
Fischer: “ Una teoría popular es que si Paul Morphy regresase hoy al ajedrez, y jugase contra los mejores jugadores contemporáneos, perdería. Nada está más lejos de la verdad. En un match, Morphy vencería hoy a cualquier jugador vivo. Morphy era quizá el jugador más preciso de cuántos han vivido. Tenía una visión completa del tablero y nunca cometía errores, a pesar de que jugase con mucha rapidez, pues sólo en raras ocasiones necesitaba más de cinco minutos para decidir por una jugada, mientras que sus oponentes, por entonces, a menudo se tomaban horas”.
Smyslov: “ No hay duda de que para Morphy el ajedrez era un arte, ni de que para el ajedrez Morphy era un gran artista. Su juego estaba formado por la frescura de pensamiento y una inagotable energía. Jugaba con inspiración, sin molestarse por penetrar en la psicología de su oponente. Jugaba, si podemos expresarlo así, un ajedrez puro. Su armonioso comprensión posicional y una profunda intuición hubieran hecho de Morphy un oponente muy peligroso incluso para los más calificados jugadores de nuestra era”.
¿Cuál era el secreto de la invencibilidad de Morphy?
Kasparov:
“Creo que en su caso se conjugaba un talento natural y una brillante erudición. Su juego constituyó el siguiente paso hacia una fase más madura en el desarrollo del ajedrez. Morphy tenía un fuerte “instinto posicional” innato y por consiguiente, puede considerársele como el “primer prototipo” de fuerte gran maestro del siglo XX. Como ya había sucedido con Philidor, Morphy estaba muy por delante de su tiempo.
Se diría que cada Campeón del mundo considera a Morphy bajo el prisma de su propio enfoque del ajedrez. Cada uno de ellos encontró en él la fuente de su propia fuerza. Aún así, más allá de todo lo ya dicho, Morphy puede considerarse el verdadero padre fundador del ajedrez moderno”.
Ver Análisis: